EL SINODO de la Iglesia anglicana votó ayer por 348 votos a favor y sólo uno en contra aprobar una moción del arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, que propone una "mayor exploración" en la posibilidad de permitir la medida. Las mujeres de esta iglesia ya pueden ser sacerdote desde 1994. Entonces, los críticos se hicieron católicos.