Antes de cinco años podría estar disponible una vacuna terapéutica contra el virus del sida que, en caso de contagio, atenuaría las consecuencias de la infección, explicó ayer el doctor Josep Maria Gatell, coordinador del 13º Simposio Nacional sobre el Sida, que se celebrará en Sitges (Garraf) este fin de semana. La sustancia, añadió Gatell, será de "enorme importancia" para los países pobres en los que escasean, o no llegan, los fármacos que en occidente mantienen al VIH en la situación de una infección crónica.

La busca de esa vacuna es el objetivo de más de 30 grupos de investigadores de todo el mundo, explicaron. "Aunque hemos logrado importantes avances, aún faltan al menos cinco años para tener un resultado válido", afirmó el inmunólogo Christian Brander, del Hospital General de Massachussets (Boston, EEUU), que participará en el encuentro.

Gatell insistió en que algunas de las investigaciones dirigidas a obtener una vacuna terapéutica --"dos o tres de esos estudios", puntualizó-- podrían conducir a un resultado positivo dentro de "un año y medio o dos años". "Será un fármaco con un efecto intermedio entre lo que se conoce como una vacuna contra la gripe o la polio y un medicamento normal, afirmó. No podrá evitar el contagio del VIH pero atenuará sus consecuencias".

Por otro lado, Gatell dio especial relevancia al hecho de que casi la mitad de los infectados por VIH sufren hepatitis C, enfermedad por la que un 10% de los afectados por la doble infección fallece en Europa. El asesor del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Hospital General Universitario de Brecia (Italia), Massimo Puotti, remarcó que "optimizando el tratamiento podemos llegar a curar al 50% de los pacientes con hepatitis C" .