La titular del Juzgado de Menores de San Sebastián ha decidido suspender la condena de dos años de internamiento que la Audiencia de Guipúzcoa había impuesto a siete de los ocho jóvenes que acosaron al escolar Jokin C.L., quien se suicidó hace un año al arrojarse desde la muralla de la localidad de Hondarribia.

La juez, la misma que impuso la primera condena de año y medio de libertad vigilada --endurecida luego por la Audiencia en dos años de internamiento-- , ha decidido que siete de los chicos realizarán actividades de resocialización en el seno familiar. La familia de la víctima, que ha puesto el grito en el cielo tras conocer la decisión, anunció que recurrirá. La magistrada se basa en un informe de los psicólogos.