Celeste tenía 16 años y cursaba segundo de bachillerato. Ayer fue asesinada en el rellano del primer piso del edificio donde vivía, en la calle del Periodista Gil Sumbiela, en Valencia, según la hipótesis de los investigadores policiales. Un vecino descubrió el cadáver a las 8.30 horas de la mañana y alertó a la policía local.

Según los vecinos, no había rastros de sangre, por lo que la muchacha pudo ser estrangulada. La policía, que detuvo a un joven de 20 años cuya identidad no fue facilitada, investigaba el entorno de Celeste, que había llegado a su casa acompañada por dos amigos a las 2.30 horas de la madrugada, después de haber estado en el parque Mofla. La policía tomó declaración a los amigos y trataba de averiguar el paradero de un exnovio con quien la víctima rompió hace tres meses, según sus compañeros.

Ningún vecino escuchó gritos de auxilio ni siquiera golpes. "Es horroroso lo que hemos visto", comentó Mari Carmen, vecina del piso donde fue hallado el cadáver. Celeste vivía con su madre, guardia jurado. Era hija única de un matrimonio separado. "Celeste era de las mejores", dijo Irene mientras depositaba una vela en el portal, que anoche se llenó de amigos con flores blancas y cirios.