Una mujer de 28 años falleció ayer tras ser apuñalada con un arma blanca en una vivienda de la localidad burgalesa de Salas de los Infantes por su «pareja estable», de 39, sin que hubiera denuncias previas por malos tratos, aunque el hombre fue detenido en 2011 por violencia machista y quedó en libertad.

El subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, explicó en rueda de prensa que el hombre, de nacionalidad búlgara, igual que la víctima, y con dos hijos menores que no estaban en ese momento en el pueblo, se entregó voluntariamente a la Guardia Civil y reconoció los hechos, sin que se sepan las circunstancias que condujeron al crimen.

La pareja, según los vecinos y la Guardia Civil, estaba perfectamente integrada en Salas de los Infantes, localidad en la que viven desde hace varios años, y ambos tenían trabajo, aunque en 2011 se produjo entre ellos lo que el subdelegado del Gobierno calificó de «conato de violencia de género». La mujer no llegó a denunciarlo y no se activó el protocolo correspondiente, explicó De la Fuente, quien no quiso ofrecer más datos sobre ese hecho al encontrarse el caso bajo secreto de sumario.

Sobre ese episodio violento ocurrido en el 2011, fuentes de la investigación detallaron a Efe que la mujer acudió a la Guardia Civil, donde puso en conocimiento de los agentes que había sido agredida, por lo que se inició el protocolo de violencia machista y fue trasladada a un centro sanitario para su evaluación. La víctima decidió no denunciar a su pareja, si bien los agentes abrieron un oficio y detuvieron ese mismo día al hombre que fue puesto a disposición judicial y quedó en libertad posteriormente. El 28 de junio se registró un incendio en la vivienda donde ayer se produjo el crimen machista, tras el cual la mujer se fue a vivir con los dos hijos al municipio soriano de San Leonardo de Yagüe.