Juan José Pérez Rangel, de 26 años, no saldrá de la cárcel antes del 2035. Entonces habrá cumplido 56. El autor del doble crimen en el aparcamiento del Putxet ha sido condenado a 52 años y nueve meses de prisión por dos delitos de asesinato y dos robos. La pena máxima establecida por el Código Penal en el momento en que sucedieron los hechos, en enero del 2003, establecía los 30 años como tiempo máximo de estancia en la cárcel, sin posibilidad alguna de acortar su pena por trabajo o buen comportamiento.

El juicio no ha aclarado el móvil, el porqué Pérez Rangel quitó la vida a dos mujeres de forma tan violenta, aunque inicialmente pareciera que solo le movía el robo. El juez que ha redactado la sentencia deja claro que poco importa. De lo que no hay duda --veredicto de culpabilidad por unanimidad-- es de su autoría.

HOMBRE PELIGROSO La sentencia, hecha pública ayer, recoge las penas solicitadas por la fiscal. Penas máximas por los asesinatos, con 25 años de cárcel por cada uno de ellos. El magistrado argumenta que ha impuesto la pena máxima por asesinato que permite la ley porque Pérez Rangel es un hombre peligroso.

El juez Gerard Thomas ha sido el encargado de redactar la sentencia y fijar la pena basándose en el veredicto de culpabilidad alcanzado por el jurado popular el sábado pasado. El magistrado subraya la "brutalidad" del ataque que sufrieron Maria Angels Ribot y María Teresa de Diego, asesinadas en el interior del aparcamiento de la calle de Bertran en enero del 2003 con 11 días de diferencia, la primera el 11 de enero y la segunda, el 22.

Pérez Rangel quitó la vida a ambas mujeres "intencionadamente, con consciencia y voluntad de matar", reza la sentencia, que argumenta con todo lujo de detalles por qué hay que aumentar la pena por las circunstancias agravantes de alevosía y ensañamiento. Ninguna tuvo posibilidad de defenderse --alevosía-- y ambas "fueron sometidas deliberadamente a sufrimientos".