La atención sanitaria prestada a Dalila Mimuoni, la primera víctima mortal en España, ha enfrentado a los familiares con las autoridades sanitarias de Madrid. Su marido, Mohamed, anunció ayer que estudia presentar una denuncia por negligencia, ya que --según él-- no recibió el trato médico adecuado y debió ser ingresada la primera de las tres veces que acudió a urgencias. También aseguró que no padecía asma y que debieron practicarle una radiografía.

El secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, y el consejero de Madrid, Juan José Güemes, defendieron que la actuación fue correcta e "hicieron lo que había que hacer en cada momento". A. M. Y.