La pista proporcionada por la Interpol dio su fruto este fin de semana con la desarticulación de una banda internacional de atracadores de joyerías asentada en Castelldefels (Baix Llobregat). Once personas, todas ellas procedentes de la antigua Yugoslavia, fueron detenidas, y se encontraron numerosas piezas de joyería en los tres pisos registrados.

La organización policial internacional informó a España de que una peligrosa banda, caracterizada por la meticulosidad en su trabajo así como el uso de una violencia desproporcionada, se había instalado en la costa catalana. La Interpol también comunicó que los sospechosos habían actuado recientemente en varias localidades alemanas.

Estos datos relacionaron a la banda con numerosos atracos cometidos en varios puntos de España. Se les imputa un robo a mano armada cometido el pasado 20 de junio en una conocida joyería de Zaragoza, así como otros atracos similares.