La ministra de Cultura Carmen Calvo volvió a insistir en una reducción del IVA (Impuesto sobre el valor añadido) en los productos culturales, entre los que incluyó la prensa. Calvo realizó estas afirmaciones durante la jornada El pluralismo en la prensa, paz y diálogo social , que organizó en el Centro de Convenciones del Fórum la Asociación de Editores de Diarios Españoles (Aede).

"Hay que preservar la cultura como un bien público y el IVA en una buena idea", dijo, en una clara referencia a las críticas que recibió cuando lanzó esta propuesta, que no depende del Gobierno español sino de Bruselas. Añadió que para convencer hay que cargarse de argumentos, aunque no descartó que en el futuro se acepte.

La ministra también subrayó que "cuanto más se mercantiliza el mercado más perdemos en la diversidad cultural".

También hizo una defensa de la diversidad cultural. "Sólo es posible construir la verdad con contrastes", manifestó la titular de Cultura. En la punta de lanza de este objetivo, la ministra situó a los medios de comunicación, esenciales, agregó, para garantizar la libertad de pensamiento "en un país con una larga tradición de verdades oficiales".

ADVERTENCIAS DE CEBRIA La jornada, que sirvió para analizar las respuestas de la prensa ente el terrorismo, tratar de los mecanismos de censura que se ciernen sobre los periodistas y constatar las amenazas de los periódicos gratuitos e internet en los periódicos de pago, también contó con la intervención del presidente de la Aede, Juan Luis Cebrián.

El consejero delegado del grupo Prisa desgranó su aportación en dos partes, aunque en un caso y en otro utilizó un mismo línea argumental. Por una parte, constató que con las nuevas tecnologías "hay un sistema cultural que se conjura en contra de la lectura".

También esbozó un futuro poco halagüeño para la prensa, tal como está concebida en la actualidad: "La sociedad va a ser digital y la prensa, que nació en paralelo al desarrollo industrial, es un producto del pasado". Pero más allá decantarse por una visión pesimista, hizo una propuesta para superar el desconcierto actual. "No podemos estar a la defensiva".

La solución, según Cebrián, es apostar por las nuevas vías de comunicación, apostar por internet, por las posibilidades que abren los teléfonos móviles. En definitiva, se trata de recuperar por estos caminos la pérdida continuada de lectores jóvenes, que en los últimos años han dejado claramente de lado el papel escrito.