La «represión violenta» por parte de Marruecos, y no el coronavirus, está detrás del descenso de llegadas de inmigrantes en patera en lo que va de año, y también en el 2019, según el último informe sobre los Derechos Humanos en la Frontera Sur elaborado por la Asociación ProDerechos Humanos de Andalucía (APDHA).

En los seis primeros meses del 2020, la reducción en el número de pateras llegadas a las costas españolas ronda el 31%, y son ya 119 personas las que han perdido la vida en las rutas migratorias, sobre todo la de Canarias.

El informe de la APDHA pone el acento en cómo se ha frenado la llegada de inmigración irregular «gracias a la subcontratación por parte de España y la UE de la violencia de Marruecos» contra los inmigrantes que tratan de llegar en patera. «El Gobierno era plenamente consciente de que poner en manos del régimen marroquí la gestión de la frontera sur europea implicaba el uso intensivo y extensivo de una desatada represión extremadamente violenta contra los subsaharianos», denuncia.

PALIZAS Y TORTURAS / La organización, con otras oenegés, como Pateras de la Vida, cifra entre 11.600 y 12.000 los migrantes que, desde Marruecos, han sido expulsados en el último año hacia el sur «mediante robos, palizas y torturas». Y subrayan la «desquiciada violencia» de los gendarmes marroquís en los campamentos construidos cerca de las fronteras de Ceuta y Melilla. Un periplo migratorio que no lo fue para las 585 personas que murieron o desaparecieron en el mar durante el 2019.

En el primer semestre del 2020, la ruta del Estrecho ha dado paso a la ruta de Canarias, un trayecto más largo pero con menor vigilancia donde la afluencia se ha multiplicado por seis. Frente a las 396 personas llegadas en el mismo periodo del 2019 se ha pasado a 2.642, según los datos del Ministerio de Interior. La organización reprocha, además, la atención recibida por los migrantes durante el estado de alarma, lamentando que pese a la existencia de una orden para que se pusieran en cuarentena y fueran controlados, se han registrado «episodios de abandono» .

La APDHA desmonta además con datos la visión de la inmigración de pateras como un problema para España, un relato fomentado por partidos como Vox y que para la oenegé supone un intento de legitimar la criminalización de los migrantes.