La Guardia Civil de Sevilla ha desmantelado una red de tráfico de cocaína, sustancia que traían desde Brasil hasta Sevilla, y ha detenido a catorce personas de la citada organización. Según ha informado hoy en un comunicado el instituto armado, la llamada operación "Cristal Potter" se puso en marcha el pasado junio y se prolongó hasta agosto con la detención de cuatro personas y la incautación de un kilo de hachís y de 17 gramos de cocaína.

Sin embargo, tras el análisis de la información y la documentación obtenida se puso en marcha una segunda fase que ha concluido con la detención de otras diez personas y un imputado. En esta segunda fase, los agentes han centrado sus pesquisas en el escalón superior de la organización y, tras un mes de investigación, se puso en marcha un dispositivo especial para la desarticulación total de la organización.

En este dispositivo se han realizado cinco registros en diferentes viviendas: tres situadas en los barrios sevillanos de Parque Amate, Sevilla Este y Polígono Sur y dos en Marchena y Alcalá de Guadaíra. La operación ha concluido con la detención de un total de catorce personas y un imputado, así como la incautación de 11,5 kilos de cocaína y más de un kilo de hachís.

Los detenidos son J.M.G., de 63 años, jefe de la organización en España y capitán del Ejército en la reserva; J.M.L.M., de 43 años y encargado de la organización en Sevilla; P.J.D., de 28 años, transportista y hombre de confianza del anterior; R.M.N.M., de 29 años, esposa del anterior y que mantenía su propia red de venta de drogas al menudeo, y F,J.L.P., de 26 años y jefe de la organización en el Arahal (Sevilla).

El resto de los detenidos son O.M.A., de 28 años y proveedor de drogas del anterior; J.J.P., de 18 años, miembro de la organización de Arahal, conductor del jefe y transportista; un menor de edad, socio y hombre de confianza del jefe de la organización ubicada en la Campiña; J.J.P.G.; J.F.Z.Z. y S.P.G., los tres de Murcia y transportistas de la droga: M.P.D.B., de 52 años; M.A.D.M., de 32 años y F.J.l.G., de 31 años, mientras que el imputado es M.B., proveedor de hachís a la organización del Arahal.

La organización reclutaba correos en ambientes relacionados con la prostitución y les pagaba 6.000 euros para que organizaran su propio viaje a Brasil, donde se les acondicionaba la droga en la maleta, tras lo que llegaban a España vía Lisboa y se alojaban en un hotel, donde la organización se hacía cargo de las maletas.