Los Mossos d'Esquadra han detenido a un un hombre de 43 años que tenía una plantación de marihuana de 3.791 plantas en el interior de contenedores metálicos de transporte marítimo.

Los contenedores estaban enterrados a unos seis metros de profundidad en su domicilio, situado en Vilobí d'Onyar (Girona), según han informado los Mossos d'Esquadra.

La detención se produjo al abrirse una investigación a raíz de una grave infracción de tráfico que cometió el detenido mientras circulaba por la carretera GI-553 y que puso en peligro a otros usuarios de la vía.

El hombre, de nacionalidad española, y que está acusado de un delito de conducción temeraria y otro contra la salud pública, iba a ser detenido en su casa cuando los agentes vieron una estructura de contenedores de transporte marítimo de la que se desprendía un fuerte olor a marihuana.

Las mismas fuentes han indicado que la estructura estaba formada por dos pisos de contenedores que estaban sepultados a unos seis metros de profundidad y que de su interior se escuchaba un ruido continuo de aparatos de aire.

También han explicado que los contenedores, que no disponían de luz natural, tenían instalado un complejo sistema de iluminación, ventilación y riego para favorecer el crecimiento de las plantas.

Se da la circunstancia de que la instalación eléctrica era ilegal y obtenía la energía de forma fraudulenta, por lo que al detenido, que tenía antecedentes, se le acusa además de un delito de defraudación de fluido eléctrico.

En el registro policial, además de las plantas de marihuana, los agentes localizaron herramientas para manipular, cultivar y para pesar la droga y 6.555 euros.