La directora general del Centro Español de Derechos Reprográficos (Cedro), Magdalena Vinent, ha anunciado hoy que los editores y autores de libros en España pedirán a Google indemnizaciones en caso de que salga adelante el proyecto de biblioteca virtual que la compañía de Eric Shcmidt negocia con el sector del libro en EEUU.

Google se ha comprometido, entre otras cosas, a abonar una indemnización a los titulares de derechos de todas las obras que ha escaneado sin autorización previa --"independientemente de su nacionalidad", según ha explicado Vinent a Portaltic.es--, situación que ya ha sido puesta en conocimiento de los socios de esta asociación para solicitar las compensaciones correspondientes.

Mejorar las condiciones del pacto

Cedro cuenta en España con el mandato de más de 9.000 autores y más de 700 editoriales para representarles en relación con este asunto. "Dado que los autores y editores españoles también pueden estar afectados, informamos a los socios sobre este acuerdo y les brindamos la posibilidad de hacer las gestiones necesarias para solicitar en su nombre las compensaciones que les pudieran corresponder", ha señalado.

En una reunión del pasado mes de septiembre con la comisaria europea, Viviane Reading, se ha informado de que los responsables del acuerdo se han comprometido a mejorar las condiciones del pacto para los titulares de derechos no estadounidenses, uno de los principales puntos de polémica del futuro acuerdo.

Book Rights Registry; gestión de pagos a los afectados

Entre otras cosas, considerarán como libros "comercialmente disponibles" en EEUU a los libros comercialmente disponibles en los países europeos. "Esto es muy importante, dado que de los libros así considerados, Google solo podrá hacer determinados usos si cuenta con la autorización expresa de sus titulares", ha aclarado la organización española.

Se contempla que un autor y un editor no estadounidenses formarán parte de la junta directiva del Book Rights Registry, el organismo que, entre otras cosas, gestionará los pagos a los autores y editores afectados por el acuerdo. También se puso de manifiesto en la reunión de Bruselas que para la aplicación del acuerdo será imprescindible la colaboración de las entidades de gestión de derechos.

Acuerdo con la coalición de creadores

Cedro ha aprobado la entrada de la asociación en la Coalición de Creadores para "trabajar juntos" en la defensa de los derechos de propiedad intelectual, con el objetivo de "reducir la piratería". De esta manera, se confirma el anuncio del presidente de la coalición, Aldo Olcese, que hace un mes reconoció que habían invitado a Cedro a formar parte de su lucha contra las copias ilícitas.

Según ha explicado Vinent, esta decisión se hará efectiva "en breve", ya que el acuerdo entre ambas entidades está pendiente únicamente de "aspectos formales". "Los autores y editores no pueden permanecer ajenos al trabajo que se está realizando desde la coalición y ahora toca conseguir una sociedad responsable con la cultura", ha resaltado.

Sin cifras exactas sobre las pérdidas por piratería

A pesar de que la directora de Cedro no dispone de cifras exactas sobre las pérdidas económicas que supone la piratería en el sector, ha asegurado "estar convencida" de que estas actuaciones tienen un "impacto considerable". A lo largo de este año, la asociación ha recibido más de 200 notificaciones de sus socios referidas a sitios de internet que, generalmente, han terminado por retirar de sus servidores las copias ilegales.

"Los derechos de los autores y editores deben ser respetados como los de cualquier otro trabajador. El sector del libro genera un número importante de puestos de trabajo y es promotor de una buena imagen de España en el exterior, además de contribuir al progreso económico --aporta un 0,7% al Producto Interior Bruto (PIB)--", ha matizado Vinent.

Digitalización a disposición de alumnos y profesores

Cedro obtiene una remuneración a través de la concesión de licencias que autorizan, por ejemplo, la digitalización de capítulos de libros o artículos de revistas para ponerlos a disposición de alumnos y profesores --bien mediante campus virtuales o bien mediante las intranets de las empresas--. "De esta forma, la cadena de generación de nuevos contenidos sigue su flujo normal", ha explicado Vinent.