La pancarta es clara, muy clara. Los enfermos de cáncer de Menorca exigen que haya cuatro oncólogos establecidos en la segunda isla de Baleares. El Hospital Verge del Toro, en Maó y el único de la isla, lleva mes y medio con la única oncóloga del hospital, Pilar Díez, de baja y desde entonces la Consejería de Salud envía cada día un oncólogo del Hospital de Son Dureta (Mallorca) para visitar a los 400 enfermos de cáncer que hay diagnosticados en Menorca. Cada día, uno diferente. Cada día con billete de ida y vuelta.

El malestar se notaba ayer frente al hospital. "En un mes y medio me han visitado dos oncólogos. Ellos son muy buenos, pero no pueden tener un seguimiento de los pacientes. ¿Qué pasa si hay una urgencia Nos sentimos desamparados"?, resumía Marc Genestar, afectado de cáncer y portavoz del resto.

Ayer, una treintena de afectados se congregaban frente al Hospital Verge del Toro y expresaban su malestar casi como pidiendo disculpas, pero convencidos de que lo que exigen es tan de cajón que hasta sabe mal expresarlo en voz alta. Una pancarta se desplegaba y detrás se colocaban Marc Genestar, Núria Rull, también afectada, Ana Maria Bau§ , la hija de una enferma que pasa la semana internada en Son Dureta... Cada uno con pesar en los ojos. Algunos, como Norberto Pons, con lágrimas porque tienen a su madre en una habitación del hospital. Ella, "sin oncólogo" y los familiares, sin información de un especialista. "Los médicos que hay aquí se desviven. El encargado de cuidados paliativos tiene 50 enfermos a su cargo. Ahora está de vacaciones y sigue trabajando, pero faltan especialistas", dijo Norberto.

La convocatoria causaba sorpresa entre los transeúntes y estos se mostraban indignados al leer la pancarta. Lo papeles en los que se recogían firmas se acababan. Médicos, personal del hospital y vecinos se apresuraban a firmar el manifiesto