"Ningún organismo puede ir contra lo que establece la Constitución y las leyes de España, menos aún un instituto. El hiyab no es símbolo ni religioso ni machista, forma parte de la práctica religiosa de la mujer musulmana", advierten en su hoja de ruta, tras la polémica, los principales líderes de las organizaciones musulmanes, y que han dirigido a las 700 comunidades españolas. "No podemos permitir que esto aparezca como una guerra entre moros y cristianos y que unos partidos defienden a los españoles cristianos y otros a los moros invasores", aconseja el texto.

Amparo Sánchez, presidenta del Centro Cultural Islámico de Valencia, difusora de la propuesta, explicó que se ha pedido a los imanes, sus autoridades religiosas, que en la jupba (oración del viernes) expliquen, cada uno como crea, el significado del hiyab, "sin entrar en polémicas ni políticas, porque hemos comprobado que muchos lo desconocen".

Mansur Escudero, presidente de la Junta Islámica Española, explicó que se trata de una vestimenta opcional. "Mi mujer unas veces lo lleva y otras no", comentó a modo de ejemplo Escudero.