Cada extremeño consume alrededor de 89 litros de cerveza al año, once más que el resto de españoles y nueve más que los europeos, excepto los alemanes que ingieren 125 litros anuales, según la especialista en nutrición y dietética y portavoz del Centro de Información Cerveza y Salud, Mercé Vidal.

Vidal, que participó ayer en Mérida en las jornadas La cerveza en la dieta mediterránea , organizadas por el Centro de Información Cerveza y Salud y la Confederación de Consumidores y Usuarios de España (Cecu), aconsejó el consumo moderado de cerveza para mantener una dieta equilibrada y señaló como saludable la ingesta de una o dos cañas diarias.

"Un poco de todo y mucho de nada", recomendó esta especialista como principio base de la dieta mediterránea, y subrayó que "no es nada saludable concentrar el consumo de cerveza en los fines de semana", porque sus beneficios "sólo se dan si se consume de forma moderada y siempre acompañada de alimento".

Aseguró que los diferentes estudios realizados demuestran que la cerveza tiene más de 2.000 compuestos beneficiosos para la salud y grandes cualidades nutricionales.

Al carecer de grasas, la cerveza "no engorda, si no se consume junto a una dieta rica en calorías" y posee menos calorías que los refrescos.

Ese aporte energético bajo, unas 50 calorías un vaso de 200 mililitros, su contenido de vitaminas del grupo B y de ácido fólico, su poder diurético y de fibra y sus pocos grados de alcohol, entre cuatro y cinco la española, permiten que esta bebida ayude a prevenir enfermedades cardiovasculares o determinados tipos de cáncer.