El Ministerio de Sanidad anunció ayer que tiene previsto aprobar un decreto que obligue a los medicamentos a llevar un dibujo en el que se indique si son compatibles con la conducción. La medida se aplicará a partir del 2007.

Si el consumo es peligroso, el icono será un coche negro dentro de un triángulo rojo. Si la incompatibilidad es moderada, será amarillo, mientras que si no hay riesgo, el color será verde.

Según Fundación Mapfre, el 82% de los médicos ve una relación directa entre salud y seguridad vial, pero solo el 52% aconseja sobre los efectos del tratamiento.