El torero extremeño Antonio Ferrera, alejado de los ruedos desde junio de 2015 debido a una grave lesión en el brazo derecho, confirmó ayer en un comunicado que ha decidido no torear ningún festejo durante esta temporada 2016 y aplaza así su reaparición para el próximo año.

El diestro de la región tuvo que cortar la temporada a mediados del mes de junio del 2015 después de sufrir una compleja fractura del radio del brazo derecho como consecuencia de una fuerte voltereta, mientras toreaba en la localidad balear de Muro.

Desde entonces y hasta, según sus palabras, el próximo 2017, Ferrera estará todavía en el dique seco, inmerso en una dura rehabilitación diaria para recuperar la funcionalidad completa del brazo lesionado.