Esta vez sí. Steve Jobs anunció ayer lo que la parroquia de Apple llevaba tiempo esperando: un reproductor de música capaz de leer también vídeo. El ejecutivo y fundador de la compañía del Macintosh, que ha vendido casi 30 millones de reproductores y ha estrenado el negocio legal de la música on line, mostró ayer lo que será el próximo paso de la evolución de la distribución de contenidos: la descarga por internet de vídeo comprado en una tienda virtual. Y comenzará por vídeos musicales, cortos y series de televisión.

El servicio, que ya ofrecen con películas otras empresas en EEUU con no demasiado éxito, tiene la particularidad de que va asociado a un dispositivo portátil, un nuevo iPod capaz de leer vídeo, almacenarlo en hasta 60 gigabytes (Gb) de espacio y de reproducirlo en su pequeña pantalla. Jobs ya justificó el pasado mes de septiembre que aún no era el momento de lanzar vídeo por el problema que planteaba el tiempo de descarga y la lentitud de las conexiones, un problema que sufren más en EEUU que en Europa o Japón.

Las primeras series descargables son Mujeres desesperadas y Perdidos .