El fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, José Martínez, señaló ayer que sería aventurado calificar de error judicial el asesinato de una mujer a manos de su exmarido, un militar denunciado varias veces por malos tratos la semana pasada en Alovera (Guadalajara) porque la víctima convivía con otro militar. A su juicio, la mujer tenía un grado de protección "importante" dado que su actual pareja no solo pertenecía al estamento castrense sino que tenía "más graduación" que el agresor.

El CGPJ ha abierto una investigación sobre lo ocurrido dado que, según su abogado, la justicia no tomo ninguna medida pese a que la mujer había denunciado. El agresor asesinó también a la actual pareja de su exmujer y después se suicidó.