Olivia e Isabella Murphy, dos gemelas británicas de 4 años, pueden haber ayudado a dar con la clave para vencer la leucemia infantil. Nacidas del mismo óvulo, con idéntico material genético, Olivia padece leucemia y, en cambio, su hermana Isabella está sana. El seguimiento de las hermanas ha permitido a un equipo científico de la Universidad de Oxford descubrir la mutación genética que provoca este cáncer. La valiosa información, calificada por la comunidad científica como "un gran paso" y publicada en Science , puede revolucionar el tratamiento y quizás la prevención de la dolencia.

Olivia e Isabella sufrieron durante su gestación una misma mutación genética, que transforma algunas células de la médula ósea en preleucémicas. Pero hace falta una segunda mutación, durante los primeros años de vida, para que las células preleucémicas se transformen en malignas y aparezca la enfermedad. Solo Olivia ha sufrido esa segunda mutación. Ha sido esa diferencia entre ambas la que ha permitido localizar las células preleucémicas en las dos y desvelar la secuencia genética de las mutaciones.

"Ahora que conocemos las células malignas, esperamos encontrar su talón de Aquiles para combatirlas", afirma el profesor Tariq Enver, responsable del estudio y miembro de la Unidad de Investigación de Hematología Molecular de la Universidad de Oxford.

Los médicos sospechan que las células precancerosas resisten la quimioterapia convencional, lo que hace que el riesgo de recaída mayor. Haber logrado aislarlas puede ser vital para comprender cómo funcionan y para diseñar nuevos tratamientos, más efectivos y menos agresivos.