El juez que investiga el accidente de la autovía A-7 en Almuñécar (Granada), en el que murieron seis trabajadores tras el desplome de una estructura metálica, ha imputado a responsables del Ministerio de Fomento y de las empresas encargadas de la ejecución de la obra por su presunta implicación en este siniestro laboral.

El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de la localidad granadina acuerda en un auto "oír en declaración como imputados", por Fomento, al jefe de Demarcación de Carreteras del Estado en Andalucía Oriental y al ingeniero director del proyecto de ejecución de obras del tramo de la autovía La Herradura-Taramay.

No se facilitaron las medidas de higiene adecuadas

El documento establece que se tome declaración a representantes legales de la Unión Temporal de Empresas (UTE) La Herradura --a la que se adjudicó la construcción del viaducto donde se produjo el siniestro--, a su jefe de obras y al coordinador de seguridad de la misma. También, a los de la mercantil subcontratada Estructuras y Montajes de Prefrabricados S. L., al jefe de equipo, capataz y encargado de la empresa y al capataz de la obra.

En el auto, fechado el 3 de agosto de 2007, el magistrado señala, con respecto al promotor de la obra, el contratista principal y la subcontratista, que procede "oír como imputados" a sus representantes legales, "por no facilitar a los trabajadores todos "los medios necesarios para desempeñar su actividad con las medidas de higiene adecuadas".

Ningún plan de control del estado de los equipos

El texto explica, asimismo, que el Plan de Seguridad y Salud elaborado por la UTE a la que se le adjudicó el trabajo "no contiene mención alguna a las labores de revisión y mantenimiento". De ahí que se pueda llegar a la conclusión de que la empresa contratista no siguió un plan sistemático de control y seguimiento del estado de los equipos.

El instructor concluye, "de forma provisional e indiciaria", que el aflojamiento y posterior rotura de un tornillo fue el que provocó la rotura de la cartera intermedia "sobre cuyas soldaduras no consta control o revisión alguna", lo que provocó el colapso de la estructura y la muerte de los trabajadores que se encontraban sobre ella.