El juez Luis Aláez, que investiga el accidente de tren en el que murieron 79 personas el 24 de julio en el barrio compostelano de Angrois, emitió ayer un auto en el que llama a declarar en calidad de imputados a los tres últimos presidentes del ente gestor de infraestructuras ferroviarias Adif y a otros 19 cargos o excargos por su presunta responsabilidad en el siniestro.
El presidente de Adif, Gonzalo Ferre, ha sido citado para el 10 de octubre, mientras que sus antecesores Enrique Verdeguer y Antonio González Marín deberán comparecer el 11 de diciembre. Además, entre los imputados figuran los consejeros de Adif desde el 11 de diciembre del 2011, cuando se inauguró la línea del tren Alvia Santiago-Ourense, en la que se produjo el descarrilamiento. Aláez ya había citado como imputados a otros cinco responsables de seguridad de Adif, que ya prestaron declaración la semana pasada.
Adif se limitó ayer a recordar que tiene presentado un recurso contra la decisión del juez de reclamarle la identificación de sus responsables para imputarles. La Abogacía del Estado argumenta que les atribuye "una especie de capacidad visionaria que les hubiera permitido prever la posibilidad de que existiera un comportamiento imprudente de naturaleza tan grave".
