El fuel derramado por los dos buques liberianos encallados en el Estrecho a causa del temporal no ha llegado por ahora a las costas españolas. Técnicos medioambientales de la Junta de Andalucía examinaron ayer el litoral algecireño y comprobaron que se encontraba limpio, por lo que apuntaron que, al tratarse de combustible ligero, este "se habría volatilizado" por el oleaje y el viento. No obstante, y mientras se desarrollen las tareas de rescate de los barcos, se mantendrá el dispositivo de emergencia para evitar que la contaminación llegue a las playas.

El delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, se reunió con la empresa elegida por el armador del Tawe para retirar el combustible y el barco. La compañía se comprometió a presentar un plan de actuación en 24 horas. Aunque se mantiene la vigilancia en la costa, López Garzón se mostró convencido de que no se producirá una situación crítica y que en cuanto mejoren las condiciones climatológicas se podrá sacar al carguero de la bahía.

Por su parte, las autoridades gibraltareñas confirmaron que el otro buque encallado en sus aguas por el agua y partido por la mitad, el Fedra, ha derramado la mitad de las 300 toneladas de combustible que albergaba en los depósitos.