Un tribunal popular empezó ayer a juzgar en la Audiencia de Barcelona a Francisca C. C, que afronta una petición de pena de cinco años de prisión por haber dejado que su esposo, José G. P, agonizara durante horas en la vivienda del matrimonio en Cornellà sin llamar al médico. La pareja llevaba 32 años casada y tenía tres hijos. El 12 de agosto del 2006, el hombre --que padecía dolencias crónicas como la diabetes-- cayó al suelo semiinconsciente y la acusada, con la ayuda de un vecino, le llevó a la cama. Sin embargo, no avisó al médico para que lo atendiera.