Llegó a Cáceres para clausurar el IV Congreso Ibérico de Baloncesto y lo hizo con la misma sabiduría, humildad y accesibilidad que se le supone. Es José Vicente Pepu Hernández, el seleccionador nacional de baloncesto.

--¿Cómo se ve en esta versión suya de docente, enseñando a futuros entrenadores?--No, enseñando no, compartiendo experiencias. No considero que yo diga lo que hay que hacer, sino lo que hacemos para que la gente opine si le parece bien o mal. Simplemente es recordar determinados detalles.--¿Qué tal ve este tipo de congresos?--Son imprescindibles, no ya solo para hablar de cosas técnicas y tácticas, sino para entrar en más profundidades. Los entrenadores tenemos que ayudar a los jóvenes y ser un apoyo importante de profesores y padres. Tenemos una capacidad para transmitir valores que pueden ser importantes en su formación.

--¿Qué tal ve este tipo de congresos?

--¿Echa de menos el chándal entre torneo y torneo de la selección española?--En alguna ocasión, no muchas, eh. Cosas como la de hoy no es como entrenar todos los días, pero sí hablas de baloncesto y tratas de divulgarlo. Eso también es importante: no de correr más o menos o de meter más o menos canastas ahora. Es meter las canastas del futuro.

--Su equipo vendrá a Extremadura el verano que viene...--Estamos encantados, sabemos que vamos a tener una acogida extraordinaria. Compartiremos ilusión y buenos momentos con todos.

--¿Qué recuerda de las veces que venía con el Estudiantes a jugar contra el Cáceres CB?--Sobre todo, que hay una afición muy entregada y que le interesa extraordinariamente el baloncesto. Esas sensaciones las podemos revivir, sin duda.

--¿Cree que el extremeño José Manuel Calderón es ya una estrella en la NBA?--Sin ninguna duda, pero la mejor noticia de todas es que él no piensa que sea una estrella y eso le permite que su límite no exista y su progresión sea constante. Cada vez es mejor en todos los aspectos. Es un trabajador nato.

--¿Cómo llegará a Pekín-2008?