La ladera devuelve las energías que mantiene guardadas todo el año. Como si de un ritual se tratara, los fieles al castillo de Luna peregrinan para recoger las semillas que Alburquerque siembra a finales de julio. Y como buenos cosechadores, las encuentran, las bailan y las aceleran hasta el amanecer. Contempopránea regresa con fuerza y este año más independiente que nunca a su origen, el pop británico y las raíces de los sellos alternativos. Aunque fue el jueves el que dio buena bienvenida a los primeros sembradores hasta el amanecer, ayer comenzó la fiesta. Ya desde primera hora, la piscina se convirtió en un nido de aficionados que se acercaban a ver el directo que la organización había programado después del éxito el año pasado del concierto en acústico y bañador de La habitación Roja. Como de costumbre, alrededor de las siete y con un calor de justicia los jóvenes -y los de espíritu- se arremolinaban frente a la taquilla, papel en mano, para ajustar la pulsera del pop en sus muñecas.

Fueron los Lawyers los primeros en inaugurar el escenario, que mantiene su estructura habitual a la de ediciones anteriores. Los jóvenes abogados se presentaron correctos a su presentación oficial como grupo revelación. Ante un público aún reducido, debido al calor y a la resaca tardía de la inauguración del jueves, comandaron y dieron pie de salida a las dos jornadas de música en la ladera polvorienta. Fueron los Tigres leones los que hicieron rugir la pista al coro de unos ‘Buenos días’ de atardecer.

El equipo de Sonido Muchacho, conocida por llevar a Juventud Juché, Kokoshca -unos habituales del festival-, Los claveles y Siesta! dieron nota afinada ante una multitud que bien traía ganas de recitar y bailar al sonido guitarrero y pop de los madrileños. Los aficionados de manual acompañaron a Tachenko y el sonido oscuro, tan sucio como impoluto de Triángulo de Amor Bizarro llenó el espacio. Eran unos de los esperados con disco recién horneado en mano. Tan esperados y de más allá de las fronteras vinieron The Pastels, que se subían a las tablas a la hora de cierre de este rotativo. Más allá de la media noche aterrizaron los Dorian.

Las melodías de los barceloneses aún recordaban a años anteriores, electrónicas y bailables. Tanto como las de Papaya y Murciano Total, encargados de redondear la jornada. Patrullero quedó reservado para los valientes y reservas de after.

SEGUNDA JORNADA

Para que no decaiga el sábado, el cartel, compensado de grupos más allá de los horarios, reserva un plantel de fuerza sonora y augura un fin de fiesta más que de pista de baile. Cerrarála jornada Guille Milkyway. Mientras tanto, Capitán Sunrise tendráque despertar como lo hicieron ayer The Lawyers a los madrugadores. Mantienen un repertorio ausente de melancolías para ello.

Con un tono homogéneo, actuará Hazte Lapón (20,45 horas). Queda la noche para que partan la escena Linda Guilala y Belako. No esperan menos los aficionados de The Charlatans, otro de los platos fuertes de esta edición que honra como no a su marca de origen, el movimiento C86, cuna del pop de libro y padre en esencia del Contempopránea. Los habituales Sidonie se subirán a las tablas alrededor de las dos de la mañana. Detergente líquido, con camisas lavadas, y Los Bonsáis cerrarán el cupo previsto para este año.