Los escolares españoles de 8 a 15 años leen hoy más textos --literarios o de cualquier otro tipo--,según datos del Ministerio de Educación y de la Asociación Nacional de Editores de Libros ANELE.

Pero el reto es conseguir que la lectura sea más efectiva como herramienta del aprendizaje y del conocimiento y rebajar la cifra del 20% de los denominados analfabetos funcionales, es decir, alumnos que cumplen los 16 años sin ser lectores competentes.

Sin embargo, el último Informe PISA, realizado en el 2009, situó a los alumnos españoles de 15 años 12 puntos por debajo de la media de los países de la OCDE en comprensión lectora. La diferencia se amplía a 1 puntos en los de 9 años, según el estudio europeo PIRLS del 2011.

La ANELE asegura en su último barómetro que el 85% de los niños de 10 a 1 años dicen leer libros en su tiempo libre, y el 77% diaria o semanalmente. José Moyano, director general de la entidad, apunta que el descenso de la lectura --suele coincidir con la adolescencia y el auge de las hormonas, lo que unido a tanto sol y tantas formas de ocio en España frena el hábito lector--.

Los expertos alertan de la baja lectura de libros en España, que la sitúa la cola de la Unión Europea. Además, ponen en entredicho lo que se lee: de los 100 libros más vendidos estos días en soporte digital, 95 son de texto, dos de autoayuda, una novela de fantasías y otra histórica.