La muerte del pequeño de 4 años en el parque del Retiro no es la única que se produce en Madrid como consecuencia de la caída de un árbol. Otras tres personas han perdido la vida por este hecho en los últimos 4 años, un extremo que ha llevado al Ayuntamiento de Madrid a constituir un grupo de trabajo que se encarga de la gestión y el control de las masas forestales y el arbolado de la ciudad.

En verano del 2014 dos personas fallecieron por circunstancias similares a la de este niño. Una fue en junio, cuando un hombre resultó afectado por el impacto de una rama de varios centenares de kilos que se desprendió y lo aplastó.

En septiembre de ese año, un hombre de 72 años fue alcanzado fatalmente por una rama de un olmo mientras paseaba. En julio del 2016, otro hombre murió por el traumatismo craneoencefálico que le causó la rama de un árbol mientras estaba sentado en un banco.