Al menos 14 personas han fallecido este sábado en los incendios forestales que, a causa de una ola de calor, han destruido decenas de miles de hectáreas y un centenar de viviendas en los sureños estados australianos de Victoria y Nueva Gales del sur. "Las áreas quemadas están todavía muy calientes y no podemos entrar en muchas de ellas" ha manifestado un portavoz de policía.El subdirector de la policía, Kieran Walshe, ha indicado que todas las muertes han sucedido en los incendios que intentan controlar en el noroeste de Melbourne, la capital de Victoria, y ha señalado que el número de víctimas mortales puede llegar hasta los 40.Los peores incendios ocurridos en Australia fueron los del miércoles de ceniza del año 1983, cuando 75 personas perecieron en Victoria. "Una parte de los fallecidos murieron en sus coches" ha explicado un bombero a la cadena de televisión Australia's Sky. "Fueron evacuados demasiado tarde y las carreteras se convirtieron en el peor lugar donde podían estar", ha declarado.Rescoldos peligrososLos bomberos australianos han aconsejado que los residentes se queden en sus casas y las defiendan de los incendios ya que gran parte de ellas pueden quemarse a causa de los rescoldos que vuelan hasta las azoteas. La evacuación es una solución de última instancia y los bomberos aconsejan que los habitantes de la zona se marchen mucho antes de que se acerque un frente de fuego."Estos fuegos van durar días y días hasta que puedan ser controlados" ha dicho un oficial de los bomberos de Victoria. en Melbourne, la temperatura la llegado el sábado hasta los 46.4 grados, la más alta que consta en los medios de comunicación locales.