El presidente del Gobierno, José María Aznar, ha decidido suspender las vacaciones navideñas de su Gabinete para que todos sus ministros estén "muy atentos" al desarrollo de la crisis del Prestige y puedan reaccionar de forma inmediata ante cualquier novedad, explicaron ayer fuentes de la Moncloa.

Tras las críticas realizadas al Ejecutivo por la participación del ministro de Fomento, Francisco Alvarez-Cascos, en una cacería en el Pirineo de Lleida mientras la marea negra llegaba a la costa gallega o la visita privada del titular de Medio Ambiente, Jaume Matas, a Doñana en las mismas fechas, Aznar ha solicitado a sus ministros que eviten los desplazamientos en las próximas semanas y estén localizables.