LOS EFECTOS

La reforma penal ha producido una verdadera eclosión de los juicios rápidos, hasta el punto de que la mitad de los que se celebran diariamente en España corresponden ya a seguridad vial. En total, hasta el pasado 30 de junio, se habían incoado cerca de 29.800 juicios rápidos por las nuevas infracciones penales que se han producido. Su importancia es tal que estas diligencias urgentes absorbieron el 93% de los procesos tramitados por alcohol y velocidad excesiva, al alcanzar los 24.716 procedimientos.

LOS JUZGADOS

La elevada proliferación de juicios rápidos y la gran cantidad de conformidades con la pena de los detenidos han impedido que se produjera el temido colapso en los juzgados con la entrada en vigor de los nuevos delitos. "La reforma no está produciendo disfunciones en su normal funcionamiento", menciona el informe, que reconoce que sin los juicios rápidos "hubiera sido inviable la aplicación" de la nueva ley. En cuanto a las conformidades, el 94% de las condenas fueron dictadas previo acuerdo.

LA CONCLUSION

El mismo documento atestigua que nos hallamos "ante un modelo de relevante eficacia judicial en la aplicación de estos delitos", como así lo demuestra "el número de condenas y también su pronta ejecución".