JOSEFA C. , una de las nueve ancianas agredidas por el celador de un geriátrico de Arenys de Mar la pasada Nochebuena, falleció ayer de un infarto, por lo que el agresor, un joven de 30 años que trabajaba en el centro, se podría enfrentar ahora una pena de homicidio. La víctima tenía más de 80 años y estaba muy alterada desde la agresión.