Cinco personas murieron ayer por inhalación de humo en una explosión de gas propano ocurrida en una vivienda de Laredo, que provocó además heridas graves a otras cuatro personas, entre ellas, un niño de cuatro años que está ingresado en el Hospital de Cruces con grandes quemaduras.

Una fuga de propano en una cocina doméstica ha sido la causa de la explosión, que se produjo a las 4.35 horas del jueves en una vivienda de la segunda planta del edificio Jai-Alai, situado en la avenida de los Derechos Humanos de Laredo, en la zona turística de la localidad cántabra.

DOS PLANTAS INCENDIADAS La explosión dio lugar a un incendio que se extendió en dos plantas del edificio, del que una treintena de vecinos fueron evacuados por los bomberos y los servicios de emergencia quienes, una vez sofocado el fuego, encontraron los cuerpos sin vida de cinco personas en una vivienda superior al punto en que se produjo la deflagración.

Los fallecidos son Jaime Bilbao Azqueta, de 78 años y natural de Munguía (Vizcaya), su esposa María Trinidad López Landa de 70 años y nacida en Bilbao y la hija de ambos, Ana María de 37 años y también bilbaína.

Las otras dos víctimas son Emilia Ballesteros Orúe, de 93 años y natural de Ortuella (Vizcaya) y Elsa Taboada Vélez, de 43 años, natural de Santa Cruz (Bolivia) y que era la cuidadora de la anciana.

Todos los cuerpos fueron hallados en la misma vivienda porque, al parecer, la anciana y su cuidadora acudieron a refugiarse en la casa de sus vecinos -el matrimonio fallecido- tras producirse la explosión de gas.

La deflagración y posterior incendio ha provocado el ingreso hospitalario de diez personas, cuatro de ellas en estado grave y que se encuentran en el Hospital bilbaíno de Cruces. Forman parte de una misma familia de origen vizcaíno.

El más grave es un niño de 4 años, R.C.B., que presenta quemaduras de segundo y tercer grado en el 49 por ciento de su cuerpo y que sufre daños por la inhalación de humos a los que quedó expuesto tras la explosión.

Además, otra niña de 8 años, que responde también a las iniciales R.C.B, tiene quemado el 35 por ciento del cuerpo y se encuentra en estado grave, al igual que los otros dos adultos que presentan quemaduras en el 40 por ciento del cuerpo.

Las seis personas restantes están heridas leves y permanecen en el Hospital Comarcal de Laredo. El ayuntamiento ha decretado tres días de luto.