LA NOTICIA que la semana pasada escandalizó a Estados Unidos y dio la vuelta al mundo sobre un pacto entre al menos 18 adolescentes para quedarse embarazadas ha dado un giro imprevisto. La alcaldesa de Gloucester, la localidad de Massachusetts donde está el instituto en el que estudiaban las jóvenes, ha asegurado que no hay datos que confirmen el acuerdo entre las menores.