Diez comunidades autónomas, entre ellas Andalucía, siguen en situación de alerta máxima, y más de 70 tramos de carreteras están cortados, a consecuencia de la ola de frío, que está previsto que hoy empeore en toda España. La isla de Mallorca quedó ayer paralizada por la nieve y el frío, en una jornada en la que las temperaturas alcanzaron los 7 grados bajo cero. Tres de sus principales carreteras quedaron afectadas.
El viento fortísimo, con rachas de más de 100 kilómetros por hora, obligó a suspender la salida de tres barcos que enlazan las Baleares entre sí y con Barcelona y Alicante. Las carreteras de Mallorca que quedaron cortadas son las que unen Caimari y Nunyola, más algunos tramos entre Pollen§a y Andratx.
ESCOLARES CON HIPOTERMIA El frío provocó incidentes de diversa importancia en casi toda la mitad norte de España. Varios escolares de Ejea (Zaragoza), de un grupo de 34 que se habían desplazado hasta Cerler (Huesca) para practicar esquí, fueron atendidos por sufrir hipotermia leve después de que el autobús en el que iban quedara bloqueado por la nieve cerca de Benasque. Renfe suspendió varios trayectos de trenes y restringió el servicio entre Burgos, Vitora y Pamplona.
Anoche era necesario el uso de cadenas para circular en 42 puertos de montaña, con excepción de los de Somport y Espina, en Huesca, y Los Tornos, El Escudo y San Glorio, en Catabria, que están en la red principal de carreteras. La Dirección General de Tráfico informó de que los 70 tramos de carreteras afectados por la nieve están situados en Barcelona, Girona, Lleida, Burgos, Palencia, Soria, Guadalajara, Huesca, La Rioja, Asturias y Mallorca. El servicio ferroviario también se vio afectado por el temporal. Renfe restringió la circulación de trenes en el trayecto Burgos-Vitoria-Pamplona y en el Palencia-Reinosa.
El Gobierno central activó ayer un plan de asistencia a los indigentes y a las personas que viven solas. El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales firmó un acuerdo de colaboración con Cáritas, la Federación Española de Municipios y Cruz Roja con el fin de activar un plan que será similar al previsto para posibles olas de calor.
La ola de frío, que disparó ayer el consumo de electricidad, también ha causado problemas en otros países europeos, como Francia (donde se registraron dos muertes) y Alemania.
