El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha ordenado el cierre cautelar de la residencia de la tercera edad "Juan XXIII", de Alcobendas, por presunto trato vejatorio de los ancianos y para evitar que se sigan produciendo los supuestos malos tratos que el pasado lunes difundió una cadena de televisión. Así lo anunció hoy el vicepresidente primero de Madrid, Ignacio González, en rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, que acordó que el cierre se lleve a cabo "en las próximas horas" y que continúe adelante la investigación iniciada con motivo del expediente sancionador abierto al centro, a cuyos responsables se les va a imponer la "máxima sanción que permita la ley", si se demuestra que hubo malos tratos a los ancianos.
González anunció que el Gobierno regional trasladará esta resolución a los responsables de la residencia y ofrecerá ayuda a los familiares y a los residentes del centro para buscarles otro lugar donde puedan ser atendidos en las condiciones adecuadas. El cierre de esta instalación se produce a raíz de que una cadena de televisión emitiera el pasado lunes un vídeo, grabado con cámara oculta en el centro, en el que se mostraba a algunos ancianos drogados con tranquilizantes, atados a las sillas con sábanas e incluso, rodeados de sus propias heces y vómitos.
La emisión de esa cinta dio lugar a la apertura de un expediente sancionador por parte de la Comunidad y a la puesta en marcha de una investigación, que seguirá adelante aunque la residencia esté cerrada, medida que se ha adoptado, según González, "para defender" a las personas que vivían en ella y evitar que "hipotéticamente" pudieran sufrir más "agresiones físicas" o malos tratos. Subrayó que se trata de un centro de gestión privada que, como los "cientos de residencias de la tercera edad" que hay en la Comunidad de Madrid, está sometido a las revisiones "periódicas y programadas" de los inspectores regionales.
La excepción
Admitió que cuando estos inspectores acuden a visitar los centros de la tercera edad "es muy frecuente que los responsables hayan tomado antes medidas para evitar que vean" situaciones como la que se producía en la residencia de Alcobendas. El vicepresidente regional aseguro que "en general" las residencias de ancianos de la Comunidad de Madrid son "bastante dignas" y ofrecen "un trato bueno" a las personas mayores, pero admitió que "desgraciadamente, siempre hay alguien que trata de hacer un uso indigno" de estas instalaciones para "hacer negocio con ellas", aunque, insistió, se trata de casos "muy aislados".
Confirmó que las inspecciones derivadas del expediente sancionador impuesto al centro Juan XXIII han puesto de manifiesto que existían "infracciones administrativas" y que tanto éstas como los supuestos malos tratos a los ancianos, han desencadenado el cierre cautelar acordado hoy. Opinó que es "significativo y relevante" que la opinión publica "sepa que puede haber personas que no son merecedoras de confianza" para regentar instalaciones de este tipo, y aseguró que la Comunidad aplicará "todo el peso de la ley para cortar de raíz" estas actuaciones.
González, que ignoraba si la dueña de la residencia de Alcobendas tenía sanciones anteriores por casos similares a éste, como apunta hoy algún medio de comunicación, dijo que la resolución de cierre cautelar se hará llegar a los responsables de la residencia de Alcobendas para que "presenten, en su caso, las reclamaciones que estimen correspondientes".
