Con aplausos, críticas y gritos de "¡vergüenza!" fue acogida ayer la primera sentencia por el naufragio del crucero Costa Concordia, en febrero del 2012, que causó una treintena de muertos. El juez de Grossetto, Pietro Molino, ha aceptado pactar una condena, a cambio de reconocer su culpa, para todos los imputados por el naufragio a excepción del comandante del buque, Francesco Schettino. El reconocimiento de culpa está previsto en las leyes italianas y permite reducir la pena en un tercio y suprimir la vista oral del proceso.

Los cinco imputados han sido condenados a penas distintas, según su grado de responsabilidad en el naufragio, que sucedió al colisionar la nave con un escollo cercano a tierra. Roberto Ferrarini, jefe de la unidad de crisis en tierra de la compañía Costa Crociere, ha sido condenado a dos años y 10 meses de prisión. El director del hotel de a bordo, Manrico Giampedroni, ha pactado dos años y seis meses; el oficial Ciro Ambrosio, un año y 11 meses, mientras que la oficial Silvia Coronica ha recibido un año y seis meses, y el timonel, Jacob Rusli Bin, un año y ocho meses. Todos respondían por homicidio múltiple e involuntario.

En la fase de diligencias previas, la naviera Costa Crociere ya había pactado una indemnización de un millón de euros como sanción administrativa, tras lo cual había quedado fuera del proceso judicial. "Es una pena injusta", han comentado varios abogados de las acusaciones particulares. "Caen más años por una ilegalidad urbanística que por un homicidio", ha reprochado Massimiliano Gabrielli, abogado de un que representa a víctimas del naufragio.

"Son pactos de pena injustos, no es normal que Schettino sea el único culpable y que tres de las condenas pactadas no alcancen siquiera los dos años", ha lamentado Daniele Bocciolini, del mismo equipo legal.

Por su parte, Pierpaolo Lucchese, el abogado defensor de los intereses de la población de la isla del Giglio, frente a cuyas playas naufragó el buque Costa Concordia, ha anunciado que presentará un recurso contra esta sentencia.