El incendio del monte Pindo, uno de que los mayores registrados en Galicia este verano, continúa controlado hoy, aunque no extinguido totalmente, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunció el refuerzo de las medidas judiciales contra los incendiarios.

El fuego, detectado el pasado miércoles a las 21:37 horas, ha quemado unas 2.200 hectáreas de esa zona inscrita en la denominada Red Natura 2000 de protección medioambiental de la Unión Europea, una tragedia que ha suscitado preocupación por las medidas de prevención de ese y otros parques naturales de gran valor patrimonial.

Las autoridades mantienen la vigilancia en la zona para evitar que se reaviven las llamas, tras calcinar ese paraje de elevado valor medioambiental por su diversidad natural, situado al borde del mar en el municipio coruñés de Carnota.

El fuego fue controlado a las 18:54 horas de ayer y en las tareas de extinción han participado 112 brigadas, 68 agentes forestales, dos técnicos y unidades militares, con el apoyo terrestre de 60 motobombas y una pala, además de dieciséis helicópteros y ocho aviones.

Feijóo advirtió hoy de que acudirá a la vía judicial contra la "plaga" incendiaria desencadenada por una marcada y dañina "intencionalidad", avivada por un "viento" favorable, para que así los responsables reparen los daños de sus acciones.

En una entrevista emitida por la emisora autonómica Radio Galega, el presidente gallego señaló que "más de dos mil incendios" y concluyó que es "imposible" que sean debido a causas naturales.

Ayer, Feijóo ya hizo un llamamiento a la colaboración ciudadana: "Tenemos que decirle a la gente que tiene que denunciar las matrículas de los coches que salen por la noche de los bosques en los que se inician los incendios, que tienen que denunciar el nombre y apellidos de aquellos que creen que están plantando el fuego".

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que acudió hoy a una ceremonia a Oviedo, destacó que los equipos que trabajan en la extinción de incendios lo hacen de forma "absolutamente profesional", reconoció que "siempre hay que mejorar" en la prevención y destacó la necesidad de "identificar a los incendiarios".

Los principales responsables del Gobierno gallego reaccionaron así a las críticas de algunos dirigentes de la oposición que en los últimos días han cuestionado el efecto que tienen los recortes presupuestarios en las políticas de prevención de fuegos forestales.

El líder del PSdeG, Pachi Vázquez, denunció en una entrevista divulgada hoy por la emisora Cadena Ser que las políticas de austeridad de la Xunta han tenido como consecuencia el "abandono total y absoluto" de medidas de prevención en los municipios, dejando vulnerables las zonas forestales a ser pasto de incendios.

A consecuencia de ello, según Vázquez, los seis parques naturales de Galicia están "abandonados de la mano de Dios" en materia de prevención, de manera que, además del incendios del monte Pindo, ha habido fuegos en los de O Caurel y A Ribeira Sacra, y el año pasado 750 hectáreas del de Fragas do Eume resultaron calcinadas.

La escasa pluviosidad registrad este verano en Galicia, unido a las elevadas temperaturas y vientos de los últimos días, han facilitado además la propagación de las llamas.

Además del incendio del monte Pindo, en Galicia permanecen controlados otros dos más en los municipios coruñeses de Negreira y Porto do Son, y activo uno en la parroquia de Peiteiros del municipio pontevedrés de Gondomar, en el que más de 20 hectáreas han resultado quemadas.