Antropólogos de EEUU y Japón han demostrado en un experimento con chimpancés, orangutanes y bonobos que estos grandes simios tienen la capacidad de leer la mente, en el sentido de que pueden detectar pensamientos o intenciones, tales como las falsas creencias, en otros sujetos, algo que hasta el momento se creía reservado a la especie humana, según reveló ayer la revista Science.

Investigadores de la Universidad de Duke de EEUU y de la Universidad de Kioto de Japón pusieron a 30 primates a visualizar una dramatización y monitorearon el movimiento de sus ojos para comprobar si estaban siguiendo la escena. En la dramatización, una persona disfrazada de simio le robaba una piedra a un hombre y la escondía en una caja, después el hombre salía de escena y la persona disfrazada cambiaba la piedra de caja y al final se la llevaba. A continuación, regresaba el hombre a la escena en búsqueda de la piedra, y los resultados del experimento demostraron que, a sabiendas que la piedra no estaba en ninguna de las cajas, los primates fijaban su mirada en la primera conscientes de que el hombre creía que estaba escondida ahí. De este modo, se anticipaban a la acción del hombre, motivada por una falsa creencia.

«Cuando hay una confrontación entre individuos, tienen curiosidad por saber qué pasa después», explicó Christopher Krupenye, un antropólogo de la Universidad de Duke. De los 30 primates que fueron sometidos al experimento, 22 fijaron su mirada en las cajas y 17 en la primera. H