La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Alzira, en funciones y ayer de guardia, acordó el envío a prisión provisional, comunicada y sin fianza de Jorge Ignacio P.J., el hombre de 38 años detenido en relación a la desaparición de la joven Marta Calvo. La causa está abierta inicialmente por homicidio pese a que el detenido ha declarado ante la Guardia Civil que la mujer habría muerto accidentalmente mientras mantenían relaciones sexuales con drogas en la casa en la que vivía alquilado en la localidad valenciana de Manuel. La pista de Marta Calvo, de 25 años y natural de Estivella (Valencia), se perdió el pasado 7 de noviembre precisamente en Manuel, una población a la que acudió para una cita con un hombre (el ahora detenido), con el que había contactado a través de una web de citas por internet. Dos días más tarde, su madre se personó en la vivienda donde el acusado vive de alquiler, ya que la última comunicación con su hija fue un wasap con esa localización. Él negó conocerla y ella denunció su desaparición.

Tras entregarse el pasado miércoles en las dependencias de la Guardia Civil de Carcaixent, el sospechoso confesó que había descuartizado el cuerpo de la joven y sus restos los había tirado en varios contenedores. Con esta estratagema, que la Guardia Civil no acaba de creerse como verosímil, el sospechoso parece tratar de ganar tiempo en las investigaciones.H