La normalidad es la tónica general en la mayoría de las carreteras en el comienzo del puente del 1 de noviembre para el que la Dirección General de Tráfico (DGT) ha organizado un dispositivo especial con la intención de dar mayor seguridad a los desplazamientos que se produzcan hasta el domingo.

No obstante, las mayores complicaciones tenían lugar en el inicio de la operación, puesta en marcha a las tres de la tarde, en Paterna (Valencia). En este punto se han registrado cuatro kilómetros de retenciones en la CV-35, así como en varias vías de salida de Barcelona y Madrid (en la M-40 entre los kilómetros 10 y 12; en la A-5, donde la avería de un coche ha hecho que se forme un atasco de tres kilómetros, y en la A-42).

La DGT prevé 5,8 millones de desplazamientos hasta la medianoche del domingo 4 de noviembre dentro de la operación especial, en la que contará con la participación de los 8.350 agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y 400 funcionarios. Además, para regular el tránsito de vehículos, se instalarán más de 500 kilómetros de carriles adicionales con el propósito de aumentar la capacidad de circulación de las vías más saturadas, que se sitúan principalmente en las salidas y las entradas de los grandes núcleos urbanos.

La DGT aconseja a los conductores que adopten las mismas precauciones tanto si el trayecto es corto o largo, recomienda que el viaje se prepare previamente e insiste en que se debe descansar cada dos horas, ser estricto con el cumplimiento de las normas de circulación y circular a una velocidad adecuada. Tráfico recuerda además que el consumo de alcohol es incompatible con la conducción y resalta que en todos los desplazamientos deben utilizarse los sistemas de seguridad adecuados, como el cinturón de seguridad, el casco o las sillas infantiles.