LA PISADA de allosaurio, una suerte de pequeño tiranosaurio que pesaba alrededor de tres toneladas, desapareció en la noche del pasado domingo. Los malhechores lograron sacar una pesada placa de un metro de diámetro por 20 centímetros de espesor que conservaba la huella de una longitud de 40 por 70 centímetros. APF