Los principales sindicatos de los Mossos d'Esquadra han criticado este miércoles que el Departament d'Interior haya apartado a siete agentes antidisturbios que habrían ocultado que eran cerca de donde Ester Quintana perdió un ojo la noche del 14 de noviembre.

Los representantes sindicales consideran que Interior no puede cambiar la versión de los hechos tan a menudo, porque resta credibilidad al cuerpo, y aseguran que ya se sabía que en aquella zona había no solo una furgoneta sino varias.

Mientras que el portavoz del Sindicat de Policies de Catalunya, David Miquel, ha pedido la dimisión del 'conseller' de Interior, Ramon Espadaler, SAP-UGT y SME-CCOO le han reprochado básicamente las formas, que saliera en público a criminalizar unos agentes cuando todavía no ha terminado de investigar.