El Tribunal Supremo considera que las condenas que Santiago del Valle y su hermana Rosa recibieron por el asesinato de la niña de cinco años Mari Luz Cortés en Huelva en enero de 2008 --de 22 años y 9 años de cárcel, respectivamente-- debieron ser aún más elevadas.

El alto tribunal se pronuncia así en la sentencia, cuyo fallo se adelantó el pasado día 2, en la que confirma la dictada por la Audiencia Provincial de Huelva, que consideró a Del Valle autor de un delito de abuso sexual sin violencia --castigado con tres años de cárcel-- y de otro de asesinato y a Rosa cómplice de este último.

El Supremo, sin embargo, asegura que el relato de los hechos considerados probados, que recoge el forcejeo entre la niña y Del Valle una vez que la menor subió a la casa de éste, hubiera permitido condenar al principal acusado como responsable de abusos sexuales con violencia o intimidación, lo que acarrea una pena de entre cinco años y diez años de prisión.

También en el caso de Rosa del Valle dice el tribunal que la calificación más correcta es la de autoría por cooperación necesaria del asesinato de Mari Luz y no la de complicidad, lo que hubiera supuesto una condena de entre quince y veinte años de cárcel.