Las temperaturas alcanzadas durante el verano en Extremadura han sido finalmente "normales", pese a "ciertas noticias" que apuntaban a un periodo menos caluroso, pero ha sido "seco" respecto a lo habitual. El delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Extremadura, Marcelino Núñez, indicó ayer que la temperatura media durante el verano ha sido de 25,2 grados, 0,1 grados más que la media de los últimos 30 años. Las zonas más cálidas han sido La Serena, Tierra de Barros y los valles del Alagón y el Tajo; y solo se han producido dos "episodios" con temperaturas más altas de lo habitual --a primeros de julio y en la segunda decena de agosto--. Durante los primeros días de julio se experimentaron temperaturas "algo más altas de lo normal" debido a una baja térmica en el sur peninsular; y en agosto se dieron algunas jornadas consecutivas por encima de 40 grados.

El verano ha sido "seco" en general --pues hubo un 48% de precipitaciones en relación con la media de los últimos años--, aunque el dato "no es significativo" dada la escasez de lluvias durante el periodo estival, apuntó.