Quizás ninguno de los que vio la facilidad con la que el francés Alain Robert escaló a principios de agosto la torre Agbar de Barcelona podría imaginarse que sufre de vértigo y que es considerado medio inválido en su país.

Todo se debe a un error de manipulación de cuerda durante un rapel, en 1982, que le provocó una caída de cabeza desde una altura de 15 metros que lo tuvo cinco días en coma. Producto del golpe se fracturó el cráneo, la nariz, ambas muñecas, un codo, los talones y la pelvis. Y como si todo esto fuera poco para sepultar su carrera como escalador, quedó con vértigo crónico como secuela de la caída. Las lesiones de aquel accidente significaron que la seguridad social francesa le considere hoy inválido en un 66%.

Sin embargo, pese al drástico pronóstico médico de rigor -que en este caso sentenció que jamás volvería a trepar por ningún lado-, un año después de la caída estaba escalando nuevamente ypoco más tarde alcanzó su máximo nivel en la especialidad solitaria. Al más puro estilo de un guión cinematográfico, el grave trauma pareció dotarlo de poderes sobrenaturales. Alain Robert se convirtió en Spiderman .

"La clave fue que un día decidí que volvería a escalar y no escuché más a los doctores que decían que mis días en este deporte se habían terminado", comenta.

A sus 44 años de edad, Robert ha alcanzado el techo de más de 60 edificios y estructuras emblemáticas y de gran altura en los cinco continentes, a menudo sin autorización ni sujeción y siempre con la única ayuda de susmanos.

Su primera cumbre urbana la conquistó cuando tenía 12 años. Todo se debió a la casualidad, ya que un día perdió las llaves de su casa, situada en el octavo piso de un edificio de la localidad francesa de Valence, y tuvo que trepar por la fachada para no quedarse en la calle.

Eso sí, pasarían varios años antes de que retomara la escalada de edificios. Eso ocurrió cuando un patrocinador le preguntó si estaba interesado en rodar un anuncio en el que tendría que subir un rascacielos.

En 1994 empezó a hacerse popular con sus primeros ascensos a edificios de gran altura de Estados Unidos. Al poco tiempo ya sería mundialmente conocido como Spiderman , tras conquistar cumbres tan ilustres como las del Empire State Building (Nueva York), Sears Tower Chicago), la torre Eiffel (París), Opera House (Sidney) y las Petronas Twin Towers (Kuala Lumpur).

Y desde el pasado 3 de agosto, la cimade la torre Agbar -que se empina a 140 metros de altitud- también brilla en esta insólita colección. La conquistó en pocomás de 20 minutos.

Este pequeño gigante de la escalada -mide 1,63 metros y pesa 48 kilos- revela que siempre tiene un ojo puesto en la arquitectura en altura de todo el mundo para fijarse nuevos desafíos.