Las tropas anglo-americanas controlan el 60% de Irak, pero el país "no está todavía estabilizado". Así se expresó ayer en Doha (Qatar) el general Victor Renuart, director de operaciones del alto mando estadounidense. Según Renuart, una vez controlada Bagdad el objetivo de las tropas es lograr un periodo transitorio seguro "que permita a los iraquís el retorno a la vida normal".

"Seguimos realizando operaciones en todo Irak, y también reduciendo focos de resistencia, en especial en las áreas meridionales, lo que aumenta la seguridad en todas las ciudades, desde Basora hasta Bagdad", manifestó Renuart. El general aseguró que Um Qasar, Basora, Nasiriya y Najaf se encuentran completamente controladas por las tropas británicas y estadounidenses, y que lo mismo sucede en otras localidades menores como Rutba y Haditha.

También constató que la ofensiva contra el régimen, o lo que queda de él, se ha trasladado al norte del país. Se refirió en concreto a la ciudad natal de Sadam, Tikrit, donde EEUU ha desplegado una estrategia que combina el uso de fuerza convencional con acciones de tipo guerrillero. "Que no haya dudas de que estamos poniendo un gran énfasis en Tikrit", manifestó.

FOCOS DE RESISTENCIA

El mando de la operación militar reconoce, sin embargo, que aún quedan numerosos focos de resistencia en todo el país. En Kerbala, situada a unos 100 kilómetros al sur de Bagdad, las fuerzas de la 101 División Aerotransportada no han conseguido aún derrotar a los fedayines leales a Sadam, mientras que Kut, en el sureste, sigue siendo una incógnita: los marines de la Primera Fuerza Expedicionaria rodearon la ciudad en su avance hacia Bagdad, y hasta ahora ninguna columna militar, ni británica ni estadounidense, se ha molestado en entrar en el casco urbano.