La deuda extremeña creció en el tercer trimestre del año el 38%, hasta 2.011 millones de euros a 30 de septiembre, lo que supone el cuarto mayor incremento después de Asturias, Cantabria y Castilla y León, 16 puntos por encima de la media autonómica, según los datos publicados ayer por el Banco de España.

La vicepresidenta extremeña, Cristina Teniente, aseguró que esta cifra entra dentro "de lo previsto en los últimos presupuestos" y la achaca a "la espiral de deuda de los últimos cuatro años". Esa evolución, insistió, obliga a la Administración a seguir incrementando su nivel de endeudamiento en el próximo ejercicio. "Esto es algo que hay que corregir, sin ninguna duda, pero lo primero es poner freno a la espiral del déficit", argumentó.

Por otro lado, informó que Extremadura recibirá el próximo martes unos 80 millones de euros por los pagos a cuenta del sistema de financiación autonómica correspondientes a diciembre, una noticia que "sin que nos lleve a lanzar las campanas al vuelo, supone cierto alivio a la tesorería", señaló.

Además de estas cuestiones, la vicepresidenta recalcó ayer que "no va a haber modificaciones en los ingresos, que están tasados" ya en las cuentas presentadas por la Junta para el 2012, dijo, y fue más allá: "No hace falta la firma por escrito porque se va a consignar en la ley que acompaña al presupuesto", vía enmienda, por lo que "no tiene que haber un compromiso previo por escrito". Este fue uno de los argumentos esgrimidos por IU para retirar su propuesta, a cambio de incrementar los ingresos en 140 millones procedentes de la venta de patrimonio público y la deuda histórica para destinarlos a prestaciones sociales, economía social y dependencia.

Teniente recalcó, como hizo el presidente extremeño en el pleno del jueves, que ese compromiso se hará efectivo solo si se dispone de ese dinero. Por ello, ofreció a los grupos políticos "ir de la mano" a reivindicar al nuevo Ejecutivo central el cobro de la deuda histórica, para conseguir "cuanto antes" las cantidades por este concepto.

Además, criticó la actitud del líder socialista, Guillermo Fernández Vara, en ese debate, en el que no participó "en un gesto de cobardía sin precedentes", dijo.