La huelga de funcionarios generó ayer un curioso debate político. Los dos grandes partidos se cuidaron muy mucho de criticar la convocatoria, mientras se lanzaban reproches. El ministro de Fomento, José Blanco, tras mostrar su "comprensión" hacia los empleados públicos les lanzó una advertencia: el único objetivo de las críticas de Mariano Rajoy al Gobierno es llegar a la Moncloa para aplicar ajustes "más severos" de los que luego culparía a José Luis Rodríguez Zapatero.

Blanco, que participaba en un Consejo de Ministros de Transportes de la UE en Zaragoza, llegó a afirmar que la única huelga criticable ayer era la de "la responsabilidad" que está llevando a cabo el líder de la oposición, al que culpó de haberse convertido en "el único miembro de la UE que todavía no se ha enterado de lo que está ocurriendo". También aprovechó para devolver a los populares donde más les duele la acusación de haber convertido a España en una economía intervenida: "En libertad vigilada no está España, sino varios miembros del PP", dijo en referencia al caso Gürtel.

DISCREPANCIAS EN EL PP En las filas conservadoras se había lanzado la consigna de aprovechar la protesta para cargar contra el Gobierno y a algún dirigente quizás se le fue la mano. Esteban González Pons, vicesecretario de comunicación del PP, llegó a afirmar que si él fuera funcionario "estaría de huelga" y llamó a los empleados públicos a demostrar que "pueden organizarse".

Poco después le corregiría la portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, para quien las huelgas "no son la solución", aunque, al igual que el Gobierno, mostró su comprensión por la "indignación de los funcionarios" ante la "irresponsabilidad" y el "engaño" del Gobierno.

El PSOE se aferró a las medidas anunciadas en el resto de países europeos para rechazar las acusaciones de improvisación. Los anuncios de ajustes duros llevados a cabo el pasado lunes por los gobiernos británico y alemán han dado al PSOE un argumento impagable. Su portavoz parlamentario, José Antonio Alonso, recordó que "España ha dado la misma respuesta que otros países", reprochando que el PP defienda las medidas tomadas por Italia o Alemania y critique en cambio las de España.